La inteligencia artificial está transformando la industria de los videojuegos. Con el uso de IA generativa, los desarrolladores pueden crear mundos abiertos más realistas, generar misiones dinámicas y mejorar la interacción con NPCs. Empresas como Ubisoft y Rockstar Games están invirtiendo en IA para crear entornos más inmersivos y mejorar la narrativa de sus títulos.
Un avance clave es el uso de IA en animaciones faciales y comportamiento de personajes, lo que permite una mayor expresividad en los protagonistas y NPCs. Además, la IA facilita el balanceo automático de dificultad, ajustando los desafíos del juego en función del desempeño del jugador.
Desde el desarrollo procedural hasta la detección de trampas en juegos online, la inteligencia artificial ha cambiado la forma en que se diseñan y disfrutan los videojuegos. La próxima década promete avances aún más sorprendentes, consolidando la IA como el motor de innovación en la industria gaming.