En 1982, John Irving Tait presentó Scrabble, un programa informático diseñado para resumir textos cortos en inglés con gran eficiencia. Su funcionamiento se basó en la identificación de material común dentro de un texto mediante el uso de plantillas de resumen predefinidas. Estas plantillas condensaban la información generalmente aceptada en ese tipo de textos, mientras que los fragmentos inesperados se mantenían sin reducción significativa en la versión final del resumen.
A diferencia de sistemas anteriores, Scrabble representó un avance notable al minimizar la posibilidad de generar resúmenes engañosos. Tait describió estos errores con el término alucinación, refiriéndose a aquellas interpretaciones distorsionadas de los textos originales. Para combatirlas, el programa incorporó tres innovaciones clave: un método más preciso para identificar los temas principales del texto, la capacidad de gestionar múltiples temas simultáneamente y un mecanismo mejorado para integrar material inesperado en los resúmenes. Su efectividad quedó demostrada a través de ejemplos prácticos, evidenciando su capacidad para preservar la información más relevante y sorprendente del texto original.
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